La apariencia de las cosas está por en cima de cualquier otro valor que tengan, hablando de un valor jerárquico de lo que se aprecia primero, desde lo que comemos, las personas con quienes nos relacionamos y el como nos visualizamos a nosotros mismos, independientemente de la individual concepción de lo que es bello y lo que no.
Hablando de la apariencia de las personas es mas notoria su importancia, pues los humanos somos seres egoístas y nos vemos reflejados en otros seres con características similares a las nuestras, por ello es que se nos hace más cruel el asesinato de un perro que la tala de un árbol puesto que éste último no tiene un rostro configurado por ojos, boca y nariz.
Es más fácil tener éxito cuando se tiene una apariencia agradable que cuando no, regularmente las clases altas tienen (o tuvieron en algún momento de su vida) una apariencia agradable a las mayorías, respecto a los cánones de belleza que se tienen en tal o cual lugar, y los marginados tienden a ser lo que se considera como "feo", no es suficiente con ser bueno en lo que haces además hay que ser bien parecido (no es mi opinión, es la realidad) sobre todo en México y América en general, ya que debido a su contexto histórico se le menosprecia al "feo", es decir, al que tiene rasgos de un nativo mexicano, o amerícano, o sea, aquellos que llaman "indios", al grado de que el que es "feo" se menosprecia a si mismo y desea parecerse a esas otras personas que tienen una evidente mayor aceptación en los círculos sociales, tiñendose el cabello, usando cremas para aclarar la piel, usando zapatos altos para parecer de mayor estatura o utilizando ropa que es agradable a la vista, etc.
Por eso considero que tanto en el arte como en la publicidad el uso de lo que es visualmente agradable es el recurso más barato que uno puede utilizar para captar la atención del público, ¿habrías leído esto si no estuvieran esas fotografías al inicio? ¿Será malo tratar de parecerse a otros en pro de la aceptación y el éxito?
